Julia Bachiller

Durante este mes de agosto (2024) nos ha llegado la triste noticia del fallecimiento de dos majariegos muy vinculados con el municipio, desde aquí llegue nuestro más sentido pésame a sus familiares y allegados. La triste situación llega al conocer que su velatorio, esa última despedida de sus seres queridos ha tenido que realizarse haciendo uso de los tanatorios de localidades cercanas.

Según trasmitió  la empresa funeraria a los familiares motivado por la falta de aire acondicionado en las salas del cementerio local-municipal por cuestiones de logística y no por otras causas o aglomeración de finados.

Consultadas al respecto fuentes municipales, y con ello no nos referimos “al que hace las fotocopias” como así denomina a nuestras fuentes el Director de Comunicación del Ayuntamiento, esta nos aseguran que una de las salas esta adecuada para su uso, con aire acondicionado en funcionamiento, mientras que la otra se encuentra en proceso de reparación. Servicios funerarios Vs Ayuntamiento, difícil dar una respuesta a lo ocurrido. En el cementerio Municipal tan solo hay dos salas de velatorio, para una población superior a los 73.000 habitantes.

El pasado 29 de junio (2024) entraba en vigor el nuevo Contrato del servicio de enterramiento, mantenimiento y conservación del Cementerio y Tanatorio Municipal, el cual fue adjudicado a la empresa de servicios funerarios  FUNEMADRID S.A., que desde febrero de este año se ha transformado en ENALTA. Un contrato de tres años de duración por importe de  205.076,85€, por lo que anualmente percibirá 68.58,95€, según datos del portal de transparencia del consistorio. De esto se deduce que los responsables de que ambas salas estén adecuadas para su uso es la empresa adjudicataria. Pero es algo que no elude la responsabilidad del Ayuntamiento para asegurar que esto se cumpla.

Majadahonda a día de hoy cuenta con dos tanatorios, uno privado “Mémora” situado  en la calle el Barbero de Sevilla (junto urb. Roza Martín), y otro Municipal junto al cementerio de la localidad, al cual muchos recurren por tradición, cercanía al núcleo urbano, y además porque el coste económico, es muy inferior, para los que carecen de un seguro de defunción.

Lamentablemente el primer testamento que recibe  una familia ante una dolorosa perdida es afrontar el elevado gasto económico  que supone abandonar este mundo. Según consta en la información aportada por el consistorio el uso de la “CAPILLA VELATORIO (por día o fracción) = 176,31 €”, a lo que hay que añadir los otros costes contratados a la funeraria para el entierro.

Aprovechamos la ocasión para proponer, a quien corresponda, que considere la posibilidad de eximir de ese gasto a los familiares de aquellos finados empadronados durante 10 años o más en el municipio, pues pensamos que la recaudación municipal a través de los impuestos les hace merecedores de un  lugar de despedida a cargo del municipio sin coste alguno.

Reiterar nuestro pésame a aquellas personas que recientemente hayan perdido un ser querido, y a aquellos que además han padecido esta situación nuestra más sincera indignación por lo sucedido.

NINGUN MAJARIEGO SE MERECE SER VELADO EN TIERRA EXTRAÑA.