
Julia Bachiller / Julia Marugán
Durante la madrugada de hoy miércoles 31 de julio (2024) se desencadenó un incendio, del cual desconocemos las causas, en el salón de belleza propiedad de Gabriela Sánchez, reconocida modelo y empresaria venezolana. Situado en la Carretera de Boadilla del Monte 8, se trata de uno de los locales comerciales situados en la parte baja de la Urbanización Jardín de la Ermita.

Por el momento parece ser que tan solo hay que lamentar daños materiales en las instalaciones provocadas por el fuego, debido a la hora en la cual tuvo lugar el incendio. A pesar de lo cual, y sin llegarse a propagar las llamas a los locales contiguos, durante la mañana de hoy dos dispositivos de Bomberos, una ambulancia, y la Guardia Civil, han permanecido en la zona, desalojando el comercio local. Comercios como: Carlin hiperpapeleria y reprografía, Banca Pueyo, el local de alimentación de productos latinos, Glow peluquería, Autoescuela Rigel, y los seguros Adeslas, se han visto afectados por la elevada concentración de dióxido de carbono (C02) desprendida por el incendio en sus instalaciones, motivo por el cual el cuerpo de Bomberos de la CAM durante la mañana han realizado mediciones en dichos locales hasta asegurar que los niveles eran los adecuados para retomar la actividad diaria de estos comercios.

En espera de la verificación de las causas de lo acontecido, tan solo nos queda lamentar lo ocurrido, ya que además se trataba de un negoció de reciente apertura, aproximadamente un año, del cual destacaban su elegante y lujosa decoración. El medio de comunicación “El País de los Negocios”, en diciembre de 2023, entre otros decía “ofrece tratamientos de vanguardia con los mejores estilistas, manicuristas y terapeutas físicos. Esto, junto a un enfoque centrado en el lujo, la perfección y la seriedad, le va a permitir brindar experiencias inolvidables a sus clientes”. Desde aquí nuestro deseo de que pronto retome su actividad, y reiteramos nuestro sentimiento de tristeza ante sucesos como este que ocasionan tanto daño económico como afectivo a sus propietarios y empleados.


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