Julia Bachiller

Uno de los lugares más fotografiados, por el encanto que trasmite su edificación por la que parece no pasar el tiempo, sin lugar a dudas es la plaza del Ayuntamiento en su conjunto. Frente al edificio del consistorio, en el suelo, descolorido y deteriorado, bordeado de piedra y flores, para realzarlo, y supuestamente protegido para no ser pisoteado, bien sea por descuido o intencionadamente con un fin, se haya el símbolo que identifica a esta ciudad, su escudo.

Durante la concentración que tuvo lugar ayer miércoles 24 de Abril (2024) ante el Ayuntamiento de Majadahonda convocada por CCOO, una vez más pudo apreciarse el desconsiderado gesto de situarse sobre el escudo de Majadahonda para inmortalizar la presencia de sus líderes políticos en un determinado acto. Y con ello me refiero a los colaboradores, Jefes de Prensa, o como ellos quieran definirlos de : VOX, VECINOS POR MAJADAHONDA, IU-Más Madrid, CCOO Y UGT, que no dudaron en pisar el escudo de Majadahonda para tomar sus fotografías, mientras sus líderes posaban sin manifestar ningún tipo de rechazo hacia sus colaboradores por el lugar y símbolo que había bajo sus pies mientras tomaban la ansiada fotografía. Imágenes que captadas desde cualquiera de los laterales evitan el bochornoso momento que pudo presenciarse, como podemos demostrar.

Resulta extravagante y deshonroso, que aquellos que alardean de su supuesta condición de ser majariegos, se mantengan impasibles ante este tipo de evitables situaciones. Estos a los que les ofende ver una bandera arcoíris en un balcón del consistorio,  los que transforman en un gesto ofensivo y deliberado el no aparecer en una fotografía institucional, los que reclaman su presencia en todo evento que tenga lugar en el municipio (en ocasiones para no acudir), los que reclaman más espacio en la revista municipal para manifestar su ideología en beneficio siempre de los ciudadanos de Majadahonda,…

Espero que estas líneas y estas imágenes les hagan recapacitar, y los vecinos no tengamos que presenciar situaciones de este tipo, en caso contrario me veré en la necesidad de  recordárselo. ¡EL ESCUDO DE MAJADAHONDA NO SE PISA!